Es comprensible si te sientes abrumado, enojado, asustado, preocupado o todo lo anterior en este momento. Tus emociones pueden estar muy dispersas y cambiar momento a momento. Quizás ha sido difícil aceptar de todo lo que está sucediendo en nuestro mundo en este momento. Y no es para menos, lo que estamos viviendo es algo sin precedentes.
La negación es un mecanismo de afrontamiento perfectamente aceptable, durante un tiempo, y es la primera etapa del duelo. Esta bien sentir y tomarnos el tiempo necesario de recalibración. Necesitamos dar tiempo a nuestros sentimientos para que se pongan al día con nuestra tumultuosa nueva realidad.
También parece haber una presión añadida, cuando "debemos" sentir como si todo estuviera bien y normal, como señal de fuerza. Sin embargo, la verdadera fuerza que se encuentra en este momento esta en el nombrar lo difícil que es y deshacernos de las expectativas pocos realistas, más cerca estaremos de encontrar formas verdaderamente saludables de afrontar la situación.. Detente y dilo. platica con amigos y seres queridos sobre los cambios y que han hecho para afrontar el trabajar desde casa, educar a los niños en el hogar o se enfrentarse a la pérdida del empleo o la inseguridad económica.
Evite las declaraciones de "qué pasaría si" y "si hubiera"
La ansiedad que siente, junto con todos los "qué pasaría si" que le vienen a la mente, es de esperar. Es casi imposible evitar pensar en los diversos escenarios que podrían suceder.. Es tentador involucrarse en pensamientos de "Si tan solo..." - esta es la etapa de negociación del dolor y la pérdida. "Si solo nuestro presidente...", "Si solo mi jefe ..", "Si solo mis padres..." Al igual que las declaraciones de "hubiera" y de "debería", estos pensamientos automáticos pueden llevarnos a ser poco productivos y con la mente más nubosa.
Es posible que te sientas enojado por estos cambios: falta de control sobre su vida, tener que quedarse para protegerse y proteger a los demás. "No debería tener que quedarme adentro todo el tiempo". Pensar en los "deberías" conduce a más enojo y la frustración Solo puedes controlar tus elecciones, acciones y respuestas. No podemos controlar lo que hacen los demás y las decisiones que toman. Use la compasión y la empatía generosamente; confíe en que está haciendo lo mejor que puede en este momento con lo tiene, y su mejor esfuerzo, como también lo intentan todos los demás.
Cuatro formas de avanzar hacia la aceptación
Cuando puedes nombrar lo que está pasando y expresar tus sentimientos, estas en las mejores condiciones de aceptar una situación. Aceptar la realidad para ti es poderoso. Es un abrazo auténtico hacia ti mismo en las circunstancias dadas. Cuando aceptamos nuestros sentimientos como una reacción normal a los acontecimientos de la vida, dejamos ir nuestras resistencias y nos liberamos para tomar decisiones de comportamiento y emocionales que realmente nos sirven.
Aquí hay algunas formas de superar esto con el espíritu de la aceptación.
1. Aceptación radical
La aceptación radical es elegir aceptarse la situación sin juzgar ni criticar, exactamente como es ahora. Nuestra situación colectiva es incierta, hay cambios y ajustes que todos debemos hacer, día a día y momento a momento. Puedes trabajar hacia la aceptación eligiendo ver que si bien existe incertidumbre, tú y los demás están haciendo lo mejor que pueden.
2. Mindfulness (más allá de la meditación)
Permanecer en el momento es fundamental. Todo lo que tenemos es este momento, aquí y ahora. Observa lo que sucede a tu alrededor. Usa tus 5 sentidos para observar y describir tu entorno y conectarte en el momento. La atención plena (mindfulness) puede incluir mucho más que meditación: se trata de elegir activamente permanecer presente en lo que sea que esté haciendo. Haz una cosa a la vez y recuérdate a ti mismo con frecuencia: "Estoy a salvo en este momento".
3. Llevar un diario
Anotar tus pensamientos y sentimientos en un espacio privado y seguro puede ayudarte a obtener claridad sobre lo que sientes y te permites aceptarlos. Escribir un diario no tiene por qué ser algo laborioso o largo. Pueden ser unas pocas líneas al final o al comienzo de cada día que lo ayuden a conectarse con tus propios pensamientos y sentimientos, lo cual no es una tarea fácil al principio, pero inténtalo, puede ser tan simple como un bloc de notas o en tu teléfono celular.
4. Gratitud
Encontrar cosas, ya sean grandes o pequeñas, por las que estar agradecido de forma regular nos ayuda a sentirnos mejor en general. Durante estos momentos estresantes en particular, mantén tu enfoque en lo que va bien, lo que estás apreciando y las personas en tu vida que amas y cuidas.
La terapia psicológica de aceptación y compromiso es una intervención para ayudar a las personas a pasar de sentirse estancadas por sus emociones a aprender a seguir adelante con sus vidas junto con sus emociones. Si crees que te ayudaría, agenda una cita con nosotros.
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